Diferencia entre variador y convertidor de frecuencia
Un variador y un convertidor de frecuencia son términos que a menudo se utilizan indistintamente para referirse al mismo dispositivo. Sin embargo, aunque ambos están relacionados y comparten características similares, existen diferencias importantes entre ellos.
En este artículo, exploraremos a fondo la diferencia entre un variador y un convertidor de frecuencia y cómo estas distinciones pueden afectar su uso en diferentes aplicaciones.
¿Qué es un convertidor de frecuencia?
Un convertidor de frecuencia, también conocido como inversor de frecuencia o variador de velocidad, es un dispositivo electrónico que convierte la corriente alterna de una fuente de alimentación en corriente continua y luego la convierte nuevamente en corriente alterna de frecuencia y voltaje variables. Su función principal es controlar y regular la velocidad de motores eléctricos de forma precisa y eficiente.
¿Qué es un variador de frecuencia?
Un variador de frecuencia, por otro lado, es un término más amplio que abarca los dispositivos que pueden variar la frecuencia de una señal eléctrica, como los autotransformadores y los arrancadores suaves. A diferencia de un convertidor de frecuencia, un variador no siempre incluye la capacidad de convertir la corriente alterna en corriente continua. Su enfoque principal se centra en la variación de la frecuencia suministrada al motor eléctrico para controlar su velocidad.
Diferencias clave entre estos dispositivos
La diferencia principal entre un variador y un convertidor de frecuencia radica en su capacidad para convertir la corriente alterna en corriente continua. El segundo tiene esta capacidad, lo que le permite ofrecer un control más preciso y una mayor eficiencia energética. Por otro lado, un variador de frecuencia puede variar la frecuencia, pero no tiene la capacidad de convertir la corriente alterna en corriente continua.
En términos prácticos, esto significa que un convertidor de frecuencia es más adecuado para aplicaciones que requieren un control muy preciso de la velocidad y un rendimiento energético óptimo. Por ejemplo, en aplicaciones industriales que implican cambios de velocidad frecuentes y bruscos, como máquinas herramienta y sistemas de automatización.
Por otro lado, un variador de frecuencia puede ser suficiente para aplicaciones que no requieren una precisión extrema y pueden prescindir de la conversión de corriente alterna a corriente continua.
En resumen, aunque los términos “variador de frecuencia” y “convertidor de frecuencia” se utilizan a menudo indistintamente, existe una diferencia significativa entre ellos. El segundo incluye la capacidad de convertir la corriente alterna en corriente continua, lo que permite un control más preciso y una mayor eficiencia energética.
Por otro lado, un variador de frecuencia se enfoca principalmente en la variación de la frecuencia suministrada al motor eléctrico sin realizar la conversión de corriente. La elección entre uno u otro dependerá de las necesidades específicas de la aplicación y la importancia del control de la velocidad y la eficiencia energética.